lunes, septiembre 12, 2005

post hurricane gold rush

Bienvenidos a mi mundo: mujer, recién aprobada mi tesis para el grado de maestría en arquitectura -a graduarme en diciembre- magna cu-cú laude y no sé que otros méritos, desempleada y en busca de, habiendo tirado ya al menos una veintena de resumés, creyendo que dentro de poco podré decir que es el documento de mayor circulación en Puerto Rico.

La construcción en nuestro país ha decidido irse-no sé si es mejor decir que ha huido-, tomadita de la mano, con la recesión económica que nos arropa. Claro, el precio del petróleo está por las nubes, así que no tiene uno por qué extrañarse del efecto dominó que se hace nido en mi campo de trabajo: la apocalipsis económica está de avanzada. Inclusive, la "economía" de infraestructura y construcción creada hasta hace poco, con los mega proyectazos de gobierno desde el chu chú tren de Rosselló hasta las comunidades especiales de Sila, ahora escasea y con ello, el trabajo de muchos profesionales y obreros que dependían del gobierno. Ay el gobierno, ese gran benefactor...

Descrito ese panorama y comprobado el hecho de que todo el mundo que alguna vez prometió un trabajito cuando terminara mi grado se ha echado para atrás -amigos, ni las palas funcionan-, también con la pesadez de ver que las oficinas que sí buscan arquitectos te requieren un mínimo de 5 años de experiencia-jelou-, hace poco me encontré con un caballero en una fiesta, amigo de la amiga de la amiga de la amiga de la amiga...bueno , se imaginan el parentesco, ¿no?. Una persona no muy allegada, con quien siempre se cruza una de palabra amable. La cosa es que este señor, comenzó a inquirir sobre lo que yo estaba haciendo. "Nena! ¿Qué es de tu vida?! ¿Terminaste la tesis?¿Te casaste?-esa última, es pregunta obligadaa lo 25-¿Ya te vamos a tirar apara Miss Universe? Tan bella.. "(sí, claro). Mientras, ahí estaba yo, con mi sonrisa tipo Gladys Escalona, asintiendo o negando- juro que esa mujer tiene que haberse hecho hilos rusos o algo por el estilo, porque a mi me dolían los cachetes. Pero, bueno... luego de ese saludo, ni corta ni perezosa le comenté mi situación- es increíble el vendedor que cada uno de nosotros llevamos dentro. Don Angel Luis-así se llama- tuvo, ante mis circunstancias, una respuesta que no me esperaba: "muchacha, si yo te tengo un trabajito para ti con un ingeniero que es esposo de mi sobrina". Alargado el parentesco, intercambiamos números de teléfono, aún en contra de mi 'no engineer policy'-los que se mueven en mi campo entienden a qué me refiero- pues hay que reconocer que no sólo de pan vive el hombre..ni sus cuentas tampoco, para esos efectos.

Después de una tremenda insistencia por que me comunicara con mister engineer, con toda la prisa que merece el asunto, enviado mi resumé, hecha la entrevista, ansiosa por demás, el tipo me dice: "está muy bien, pero yo no voy a necesitar gente quizás hasta después de octubre..". Eh, caballero...¿Quizás? ¿Octubre? Sabrán que ahí quedó la cosa..

Hace poco, revisando mis corrreos electrónicos, mister engineer me escribió para informarme de una oportunidad de empleo. Qué detallista, ¿no?. De todos los lugares en los que se podría pensar, ahora New Orleans me miraba, con cara de desaastre, como oportuna oportunidad-valga la redundancia. Aparentemente, se repite la historia en una especie de 'post hurricane gold rush'. Arquitectos, ingenieros, contratistas y los etcétera de la construcción están que se les hace la boca agua, porque ahí hay trabajo pa' rato. Imaginen, casi nada, sólo reconstruir una ciudad. Claro, pienso que hay un lado muy humano en todo esto con tanta gente que habrá perdido sus casas. Lo que me pregunto es, ¿deberé abandonar a mi islita para poder ejercer mi carrera?¿es necesario? Siempre pensé en quedarme aquí, en devolverle de alguna forma u otra a mi país mi conocimiento en pro de su bienestar. Constituye un pensamiento muy noble. Mas, ante la falta de trabajo, estoy a tan sólo un clic del botón de 'send' para enviar lo que no me resume y convertirme también en minera.

2 Comments:

Blogger Victor Valdovinos said...

Darle al país lo que recibiste,
es cierto,
es primordial
y también es luchar contra eso.

Qué es más importante para usted?
- devolverle lo que le dió su isla
- llenarse por un momento los bolsillos

...

Haga lo que crea conveniente para usted.
Apoyo total.

miércoles, septiembre 14, 2005 1:26:00 a.m.  
Blogger Lalo said...

Podría decir que el gobierno es buen benefactor, pero a largo plazo. Tienes la bendición de formar parte de un milagro en ciernes, en tanto parte de tu tarea será dar la esperanza a personas que el "Panopticon" a duras penas otorga por "conflicto de intereses". Si el factor tiempo te afecta, ten la fe de que esta obra que ciertamente reviste de nobleza, hará que esta república (no reconocida) abrirá los ojos eventualmente y se dará cuenta del talento que produce.

sábado, septiembre 17, 2005 12:26:00 a.m.  

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